30 de noviembre de 2010

Experiencia déjà vu: Reforma ortográfica del castellano / II

Recomiendo leer antes lo que el 17.11.2010 en esta bitácora escribí.

Pues, anteayer los representantes de las academias de la lengua se reunieron en Guadalajara, y después de tres semanas de intensa y controvertida discusión pública en los dos lados del Atlántico sobre la reforma ortográfica que sería tema de esta reunión, oficialmente de ella no salío más que este comunicado tan vacío en contenido como pesado por lo ceremonioso que es.

Gracias a la prensa nos enteramos de lo que pasó en esta reunión:

El País

El Mundo

Minuto uno

Para mí el resumen es: La reforma ortográfica en su esencia está aprobada.

Y las concesiones que han hecho los académicos en Guadalajara son mínimas: han cedido en la denominación de las letras, por lo visto un tema muy caliente entre los castellanoparlantes; para mí, cuya lenga materna no es el castellano, me importa poco.

En lo demás todo queda igual. Casi igual: La persona que pone acento usando "solo" como adverbio ya no debe esperar al perdón de los guardianes de la lengua, sino aquellos se limitan a sólo recomendarle la omisión del acento.

Pero en cuanto al "guión" y al "truhán" los guardianes son severos y no hay perdón: quien pone acento en estas palabras, será multado o castigado.

1 comentario:

Cigarra dijo...

Pues sintiéndolo mucho por los señores Académicos yo pienso seguir utilizando las reglas de ortografía antiguas, que me parecen eficaces, útiles y elegantes. O sea, en términos castizos "me ato al dedo" sus recomendaciones (A ver cómo traduces esto al alemán, ¿eh?)(Soy mala, ja, ja, ja)
Volviendo a la ortografía ¿como diferencian una palabra de otra cuando digo "Yo sólo tomo cafe solo" si no le pongo tilde a la primera?
¡Desobediencia civil ortográfica!