23 de abril de 2011

Puente de Neutor de Ulm

Visitando a una ciudad de altísimo interés turístico, una vez llegado en tren a la estación, me ocurrió ir visitar a la Neutorbrücke, al Puente de Neutor, en el noroeste del centro histórico:


Un puente eregido en 1906/07. A mediados de los años 80 condenada a ser derrumbada, pero gracias a una reforma realizada entre 1987 y 1989 llegó a nuestros días:


Por debajo corren sobre todo las vías del tren que llevan a Stuttgart:


Entre las vías la casa donde vivir más me gustaría:


Volviendo al centro histórico dándose cuenta de la constelación en la cual coinciden puente y catedral:

10 de abril de 2011

Freyburg (en el río Unstrut)

¡Sí, es Freyburg y no es Freiburg (como se llaman ciudades más importantes que ésta en Suiza y Alemania y seguramente unos sitios más), una ciudad de alrededor de 5 mil habitantes! Acercándose a Freyburg ya se da cuenta uno que se encuentra situada entre viñedos, y yendo (el día anterior) de la estación ferrocarril en busca de mi hotel me doy cuenta de la importancia que aquí se da a la uva:


Pienso que en los lugares que se visita el hotel normalmente no es digno de mucha atención, pero el hotel que me tocó en esta ciudad - no por casualidad, porque a la hora de hacer la reserva algo me atrajo, aunque no me acerqué en bicicleta ... - sí merece mención:


Es el Fahrradhotel Alte(r) Speiche(r) (Hotel ciclista Alte(r) Speiche(r)) cuyo nombre esconde un juego de conceptos:

Alter Speicher = Viejo almacén (referiéndose a la función anterior del edificio)
Alte Speiche = Viejo rayo (de la rueda de bicicleta).

Es un hotel del cual sueña el viajero: habitaciones espaciosas y con buena luz tanto natural como también artificial, con mesa grande para dejar las cosas o para trabajar ... de noche casi me daba pena dejarla para dar una vuelta por la ciudad y conocer sus tabernas:


Antes de explorar el pueblo nocturno aprovechaba la tarde para conocer más de él y de los viñedos que lo rodean:

Falta conocer lo que, aparte del vino, aunque parcialmente en base de él, se ha hecho la gran industria de Freyburg: la del Champán. En 1856 fue fundada la fábrica de champanes que hoy en día se llama Rotkäppchen (significa Caparucita roja, pero no tiene nada que ver con el cuento del mismo título; se llama así por las capas rojas con las cuales en algún momento se decidió a cubrir los corchos de las botellas).

Prosperó bien la fábrica lo que se refleja en algunos de los edificios que aún datan del siglo diecinueve:


Se divisa en el centro de la foto, entre botella (a la izquierda) y torre (a la derecha) la cúpula de un patio interior, erigido y cubierto de una estructura de cristal a finales del siglo XIX,  y hoy bajo protección de monumento, como ejemplo de la arquitectura industrial de aquella época; aquí se lo ve por dentro:


Atracción central que enseña el guía es el barril cuvée (en el cual está fermentando el zumo de las uvas) hecho de madera más grande de Alemania:


Fue construido en 1896 con la madera de 25 robles y tiene la capacidad de 120.000 litros, lo que corresponde a la producción de 160.000 botellas de champán.

Dibujos y pósters de propaganda enmarcados y colgados en una pared de este patio interior permiten el intento de entretejer fotográficamente los reflejos de su espacio más emblemático en expresiones gráficas de la historia de la empresa:



La situación económica del Rotkäppchen atravesaba tiempos de penuria, y una vía para salir era la propaganda; recogiendo bien la sensibilidad y el estilo de la época, las artes gráficas nos han dejado buenas creaciones, como ésa, colgada en un almacén de botellas en los sótanos de la bodega:
 

Después de que en 1990 la República Federal de Alemania se quedó con la otra parte (la República Democrática Alemana, a la cual pertenecía Freyburg), la idea y el diseño de una propaganda así se prestó a quitar la fama de inferioridad y sobreenvejicimiento que estaba ligada con la marca Rotkäppchen, y sustituyéndola por los atributos de modernidad y contemporaneidad capaces de ayudar a levantar cabeza a la empresa en crisis y en peligro de no sobrevivir:


Dejando la fábrica Rotkäppchen, volviendo al pueblo y dando un paseo más por él se da cuenta uno de reliquias arquitectónicas de un estilo que en el territorio de la extinta R.D.A. todavia se encuentran más que en lo que ya antes de 1990 ha sido la R.F.A.; casi a cada paso se encuentra portales de casa como éstas:


Aunque los del sur de Europa no lo van a creer o no lo quieren saber: a mí los vinos de estas tierras, de la región vinícola europea más norteña, me gustaron bastante, tanto los tintos como los blancos que probé. Reconozco que no soy catador - pero estoy seguro que los especialistas en catar vinos no lleguen al extremo de dar la razón a los del sur europeo.

Los vinos sí me gustaron, pero de otra especialidad de aquí, de la Thüringer Bratwurst (Salchicha frita de Turingia; aunque Freyburg pertenece al estado federado de Sajonia-Anhalt, él de Turingia está muy cerca)



no me aficioné. Pero como es tan popular en este sitio, hay asadores en la calle, formándose colas de gente hambrienta delante de ellas, la probé en dos ocasiones.

Para quien asa las salchichas es un reto tener siempre ejemplares que estén en su punto para satisfacer la demanda - lo que casi es imposible, como se ve aquí: 3 salchichas hechas al lado de 4 colocados pocos segundos antes:



Cuestión importante en el momento de despachar la salchicha metida en un panecillo es si el cliente prefiere poca o normal o doble ración de mostaza (preferencia que no hace variar el precio);la aplicación de la mostaza se realiza colocándola a lo largo de toda la salchicha:



Antes de despedirme de Freyburg e irme a la estación compré en esta venta de vinos al pie de un viñedo muy lindo, de recuerdo una botella de vino tinto:

9 de abril de 2011

Estación ferrocarril de Freyburg

Para llegar a las tierras de viticultura más norteñas de Europa, bien sirve el tren: para ir de Naumburg (muy en el sur del estado de Sajonia-Anhalt, al suroeste de Leipzig) al valle del río Unstrut donde se encuentran los viñedos hay que ir al noroeste hacia Lauda y Wangen, y en la todavía bastante buena red ferrocarril existe una línea correspondiente, el itinerario no. 585.

Para ir a uno de los centros de producción de vino, a Freyburg, diariamente hay hasta 17 trenes. (Freyburg stá sito entre Naumburg y Lauda).

La estación de Freyburg sorprende por sus dimensiones:

A la vez llama la atención que está totalmente desatendida (hasta falta un autómata para sacar los billetes) y destartalándose paulatinamente, muy al contrario del castillo que muy mimado se ve en la altura:

No llegué a entender la función que en su tiempo tenía este espacio:

Pero sí me gustaron ciertos detalles de él:

Lo que han sido en su tiempo los servicios:

De guasa o de burla o de caricatura o de no sé qué se puede considerar lo único moderno que hay en esta estación - este cubo de basura, que a la vez pide que no se fume en esta estación dejada a su suerte:
... y lo que se ve escrito al lado de Glas parece pura burla considerando la realidad: Aktion freundlicher Bahnhof = Acción estación ferrocarril simpática.

Pero no obstante, y sea como sea: poco antes de que entraba un tren (como se ve: diminuto) presenciaba al hecho que había unos ciclistas que contaron con él:

7 de abril de 2011

El tren del Brocken

Subo a pie a uno de los montes más emblemáticos de las cordilleras no alpinas de Alemania, de 1142 m de altura, llamado Brocken.

Empieza el día con buen tiempo; por eso y por la cuesta ando sudando, no sólo por el sol sino también por los 600 m de subida). La visibilidad es de decenas de kilómetros, o sea una maravilla de excursión.

Poco antes de llegar a la cima (desde luego, de un aspecto poco romántico ...) cambia el tiempo de forma casi dramática: cielo gris, aire frío, y no se ve más lejos que unos muy pocos kilómetros:

A quien no conoce el terreno sorprenderá la cruz a la derecha que avisa de un paso a nivel: ¡Sí hay un tren que sube a esta cumbre!

Y por el tiempo fatal que reina me decido coger el próximo tren que baja al valle, esperando allí la clemencia de un tiempo mejor. Y tengo suerte, entra un tren cuya partida está prevista dentro de poco:

El personal ferroviario acopla la locomotora que debe servir de cabeza del tren:

Esta línea de tren forma una pequeña parte de la red de los Harzer Schmalspurbahnen (Trenes del Harz de vía estrecha):

La línea que sube al monte Brocken cuenta, por razones de atraer al turismo (y por consiguiente con precios más altos que la tarifa normal), casi exclusivamente con la tracción de locomotoras de vapor:

De agua llevan 8 metros cúbicos y de carbón 4 toneladas.

Hora y media o un poco más dura un viaje del Brocken hasta Wernigerode, sito en el margen de la cordillera Harz, atravesando sobre todo bosques de pinos:

En una parada intermedia, entretanto el tiempo ha aclarado un poco, hay tiempo para ver de más de cerca la locomotora ...

... producida hace 57 años en la extinta República Democrática Alemana en la VEB Lokomotivbau Karl Marx (VEB = Volkseigener Betrieb = Empresa propiedad del pueblo - o sea: estatal - de construcción de locomotoras Carlos Marx):

En la estación de Drei Annen Hohne, nudo ferroviario (donde a veces y también en el momento que llegué, coinciden tres locomotoras de vapor) hace falta un transbordo.

Del Brocken en invierno salen diariamente 6 trenes, en verano más. Algunos van directamente a Wernigerode, otros no y obligan por ello a un transbordo justo en esta estación - lo que da tiempo para ver un poco lo que ocurre:

Las plataformas de los vagones, las entradas al vagón y los pasos de un vagón al otro igual como los conocía en los años 50 del siglo pasado:

Sigue el viaje, siempre cuesta abajo ...:

... hasta que el tren al fin llega a su meta, Wernigerode:

Aquí hay correspondencia con la red ferrocarril de ancho normal, cuyas vías se puede percibir al fondo (en las últimas dos fotografías).