¡Gran acontecimiento en lo que atañe al sistema muniqués del transporte público! Desde hace décadas la primera puesta en marcha de una nueva línea de tranvía: con un recorrido de tres kilómetros, aproximadamente, partiendo del barrio de Schwabing y dirigiéndose a un barrio nuevo tanto residencial como también de oficinas sito en el norte.
Durante por lo menos cuarenta años no hubo más que reducción de la red de tranvías, justificada por la extensión contínua de la del metro. En Múnich, sin embargo, no se llegó al extremo de eliminar por completo la red de los tranvías.
Nace el tranvía nuevo en una plaza céntrica del barrio de Schwabing, llamada curiosamente Münchner Freiheit (literalmente: libertad muniquesa). No es una parada terminal cualquiera: los arquitectos se esmeraron mucho y diseñaron una construcción que según la prensa pocas comparables tiene en el mundo:
Entra un tranvía en la estación:
Por debajo del gran techo de la parada la escalera para bajar al metro:
... y mirando hacia el sur se ve (contra el sol) la avenida (castigada por un tráfico fuerte explicable por todo menos que una necesidad) que lleva al centro de Múnich:
Durante todo el día circulaban tranvías por la nueva línea, podía subir quien quería porque billetes no hacían falta, todo se desarrollaba al estilo de una fiesta popular.
La empresa municipal del transporte público ponía también algunos tranvías antiguos, con personal disfrazado al estilo de la época:
Curiosa e interesante la lectura de las instrucciones y avisos de aquella época:
... cuando, pensando en usuarios extranjeros del tranvía sólo se contaba con personas de habla inglesa, francesa e italiana:
... y cuando todavía reinaba como moneda el marco, significando 20 de él una multa (por viajar sin billete) contundente:
Otra obra de ingeniería muy llamativa de la nueva línea de tranvía es el puente que supera la barrera que representa una carretera de tipo autopista - un puente que parece ejemplar por sólo admitir tranvías, ciclistas y peatones, excluyendo a los automóviles:
Pues algo de verdad expresa el cartel que está colocado en un paso peatonal a nivel al pie de este puente:
... aunque a pesar de todas estas ventajas que ofrece el sistema municipal de transporte público, la gente queda fiel a sus coches - lo observo cada día: la organización del transporte público es excelente, pero los autobúses y tranvías etc. circulan con muy poca gente o a veces incluso vacíos, mientras que al mismo tiempo y en el mismo trayecto que cubre la línea de autobús o de tranvía o de metro abunda el tráfico individual motorizado.
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